Se incrementa el número de adolescentes que son privados de libertad por primera vez. En diciembre de 2012, de 61 adolescentes que fueron internados en hogares del INAU, 31 eran primarios. En enero del corriente año se privaron de libertad a 64 chiquilines de los cuales 33 no tenían antecedentes mientras que entre el 22 y 29 de abril se procesaron 18 adolescentes de los cuales 12 eran primarios. Para el director del Sirpa, “la reducción de las fugas” y “la conversión de internos mediante salidas laborales pueden haber hecho que los delincuentes salgan a reclutar más menores para las tareas delictivas”. Para el abogado Daniel Sayagués Laso, la situación se explica por la ley que fija la obligatoriedad de la privación de libertad para delitos gravísimos. El Sipra alberga a 550 adolescentes en conflicto con la ley cuando su verdadera capacidad locativa es de 350 plazas.